El alcalde de La Línea de la Concepción, Juan Carlos Juárez, entiende que la delegada provincial de la Consejería de Medio Ambiente, Gemma Araujo, pretende argumentar con sus palabras la falta de atención que la comunidad autónoma presta al sistema de arroyos que evacuan las aguas pluviales de Sierra Carbonera.
“Ella dice que en el plan de prevención de avenidas e inundaciones en cauces urbanos, y concretamente en el decreto mediante el cual fue aprobado, se indica en su artículo trece que corresponde a los municipios la recogida de los residuos sólidos arrojados a los cauces públicos en tramos urbanos. Debe saber que la zona del Zabal no es tramo urbano, además de que ese artículo atañe a la recogida de residuos sólidos urbanos, no a la maleza o a la falta de desbroce existente. Eso debe quedar claro”, indica Juárez, quien explica a la delegada provincial que la zona del Zabal es, según el PGOU vigente, zona rústica de especial protección agrícola, y como tal dichos arroyos discurren por una zona que medioambientalmente hablando está protegida por las leyes y que en ningún momento se puede catalogar como urbana”.
Para el alcalde, las palabras de Araujo intentan justificar y excusar sus responsabilidades en esta materia, “toda vez que el pasado 27 de agosto se inició un expediente sancionador, cuantificado en cien mil euros, por el mal estado que presentan estos arroyos, con peligro de incendio por vegetación seca y de inundación en cuanto aparezcan las primeras lluvias. Ese expediente va contra la titular de esos arroyos, es decir la Cuenca Mediterránea Andaluza. No es de recibo que exijamos en nuestro municipio que todos los propietarios de terrenos los tengan en perfectas condiciones y que los arroyos, competencia de la Junta de Andalucía, estén abandonados a su suerte. Si ella dice que ha retirado ochenta y seis mil metros cúbicos de suciedad le animo a que continúe haciendo su trabajo y lo haga en todo el recorrido, que es su obligación”.
