¿Alguien entiende al ministro de Sanidad, Salvador Illa cuando lanza los mensajes subliminales? Decía ayer: “Al final del verano conseguiremos la inmunidad de grupo”.
Mientras, Pedro Sánchez (El Presidente), afirma que “entraremos en una época estival donde lo que tenemos que hacer es regalarnos seguridad”. Cada uno a su aire y aquí o no tienen ni idea de lo que dicen o nos están engañando con eso de que se ve la luz al final del túnel porque saben perfectamente lo que nos queda todavía ya que, aunque tengamos muy pronto las vacunas, no sabemos cómo van a llegar a funcionar.
Y si esto va para largo, pienso que se equivocan con el tema de la hostelería porque si el turismo que viene del extranjero se está muriendo y castigan al de dentro, estamos listos de papeles.
Si el virus sigue ahí, que va a seguir, tenemos que aprender a convivir con él y evitar como sea que la ruina no sea total en un sector tan fundamental como es el de la hostelería. Eso de obligar a los restaurantes y bares a cerrar a las seis de la tarde para que abran dos horas más tarde, es absolutamente absurdo porque si los locales tienen que cumplir a rajatabla las normas que lo tienen que hacer porque si no lo hacen les cierran, entonces ¿Qué problema hay? No se puede vivir con “te subo la moral” y al rato “te la bajo”. Siempre recurren a esos expertos fantasmas que a estas alturas desconocemos totalmente quienes son o si, realmente, existen que tampoco entendemos esto porque si conocemos todos los cargos de todas las administraciones ¿A qué viene ese silencio sobre esos supuestos expertos que nos han llevado a los casi ochenta mil muertos, lo que nos lleva a ser el segundo país en número de muertos por coronavirus?.
Llega la Navidad y nos sueltan para que consumamos, pero de forma paralela nos insinúan que en enero tendremos la tercera ola de la pandemia y, por tanto, más muertos. Esto último ya lo dan por hecho los virólogos.
Así que dígannos la verdad, aunque nos duela, porque sueltos y sin una información concreta y veraz vamos al desastre.
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