Cientos de vecinos y vecinas y visitantes disfrutaron de los 15 potajes diferentes elaborados por los distintos bares y restaurantes de Palmones, Guadacorte y del parque empresarial.
Luego tuvo lugar a media tarde el pasacalle infantil con diferentes animaciones y donde no faltó el ingenio de los disfraces de los pequeños como uno colectivo del juego del Monopoly y otro que reflejaba una gran boda. “Una fiesta que se ha celebrado en un ambiente familiar y divertido”, apuntó Gómez.
Tampoco faltó la imaginación en el pasacalle de adultos por la noche con disfraces como el de un grupo de vecinos que representaron un vuelo de avión con todos los detalles. “El gran nivel que hubo en el concurso de disfraces, tanto infantil como de adulto, donde para el jurado fue muy difícil dar un veredicto”.
