La coordinadora defiende la eliminación de partes de las reformas de las jubilaciones que implican alargar la edad de jubilación, así como la penalización de las prejubilaciones con 40 años o más cotizados. Igualmente piden unas pensiones mínimas que garanticen un ingreso digno en relación al IPC y la carta social europea.
En esa línea, ponen de manifiesto que en los últimos años las pensiones se han visto mermadas por la pérdida real de poder adquisitivo ampliándose la brecha de género que perjudica a las mujeres. Una perdida a la que se le unió los copagos farmacéuticos y de determinados servicios médicos junto a las constantes subidas de suministros básicos como la energía, agua o transporte,
Finalmente, desde el colectivo anuncian que van a seguir en la calle y luchando hasta que obtengan sus reivindicaciones y se garanticen unas pensiones dignas y públicas frente a los partidos que “quieren desmantelar el sistema de pensiones a favor de los planes de pensiones privados en manos de las entidades financieras”.